En anteriores posts ya hemos hablado de qué comer entre horas para sentirnos mejor. Hoy, además, queremos conocer esos alimentos que retrasan el envejecimiento y nos mantienen jóvenes y sanos. ¡No te olvides de ninguno!
Alimentos con vitamina C
La vitamina C constituye la primera línea de defensa antioxidante en la sangre y es muy necesaria para conservar la piel bonita y sana. Podemos obtenerla de la espinaca, la col, el tomate, la fresa, el kiwi, la naranja, el melón, la guayaba o la papaya, entre otros. ¡Prepárala en zumo!
Alimentos con vitamina A
De gran acción antirradical y protectora de las membranas celulares, la vitamina A se consume a través del hígado de pescado, la zanahoria, las espinacas, los berros, el queso, la mantequilla,…
Vitaminas B2, B6, B9
Intervienen en la síntesis de colágeno, del ADN y el ARN, y actúan como agentes defensivos y reparadores de las membranas celulares. Por eso, es importante que optemos por alimentos ricos en todas ellas: las principales fuentes de B2 son la leche, la carne de ternera, el cerdo, el cordero, las espinacas, el aguacate, los espárragos, el germen de trigo o los guisantes; los que contienen vitamina B6 son la semilla de girasol, el atún, el pollo, el mango o el plátano; y entre los de la B9 destacan las espinacas, los berros, los espárragos, los guisantes y las habas. Son todos alimentos muy básicos, por lo que con una dieta variada no es difícil conseguir un buen aporte de estas vitaminas.
Vitamina E
Considerada el antioxidante más potente, esta grasa soluble inutiliza a los radicales libres impidiendo que produzcan lesiones en los tejidos. Se encuentra en el aceite de oliva y en semillas como las nueces, las almendras, las avellanas, el girasol, el germen de trigo o la soja, además del pavo, la col, los pimientos, los espárragos,…
Caroteno
Se combina con el tocoferol (un antioxidante) para impedir daños en las membranas celulares, y se encuentra en acelgas, berros, espinacas, lechuga, zanahoria, col mango, sandía, kiwi, uva, papaya o guayaba. Un menú rico en frutas y verduras nos aportará casi seguro una buena dosis.
Selenio
Es un mineral de vital importancia con propiedades antioxidantes parecidas a las de la vitamina E, que se localiza en pastas, harina, pan de trigo, arroz integral, cebolla, tomate, brócoli, melón, salmón, bacalao, trucha,…
Flavonoides
Se les denomina súper-antioxidantes por sus potentes propiedades antiinflamatorias. Ejercen gran protección sobre los huesos y la piel, así como en el sistema nervioso y circulatorio. Se consumen a través de la naranja, el limón, las cerezas, el apio, el brócoli, la lechuga, la pera, la soja, la manzana y las aceitunas, entre otros.
H2O
Se aconseja ingerir al menos un litro y medio al día, debido a que el agua no sólo es básica para mantener el nivel óptimo de hidratación, sino también para favorecer la digestión, transportar y absorber las sustancias antiedad y eliminar los materiales de deshecho. Y tú, ¿te has tomado tus ocho vasos de agua hoy?
¡Hasta el siguiente post!
